Esencia principal:
Arce
Madera dura y ligera utilizada para incrustaciones. Crece principalmente en Austria, pero está muy extendida por todo el hemisferio norte, desde Japón hasta América del Norte, pasando por China y Europa. Es una de las maderas más claras que existen, con tendencia al blanco, es similar a la madera de tilo o abedul. El brezo se utiliza en la producción de secretarios antiguos.
Nogal
La madera de nogal procede de la planta cuyo nombre botánico es jugalans regia, probablemente originaria de Oriente pero muy común en Europa. De color marrón claro u oscuro, es una madera dura con una hermosa veta, muy utilizada en muebles antiguos. Fue la esencia principal en Italia durante todo el Renacimiento y posteriormente tuvo una buena difusión en Europa, especialmente en Inglaterra, hasta la llegada de la caoba. Se utilizaba para muebles de madera maciza y en ocasiones tallas e incrustaciones, su única gran limitación es que sufre mucho de carcoma. En Francia fue muy utilizado más que cualquier otra cosa en las provincias. En la segunda mitad del siglo XVIII su uso disminuyó significativamente porque se prefirió la caoba y otras maderas exóticas.
Olmo
Madera muy dura y compacta, que procede del ulmus campestris. Se distingue por su color marrón rojizo. Se utilizó principalmente para muebles rústicos en Francia, Holanda y Escandinavia. En Inglaterra, sin embargo, también se usó mucho en trabajos de taracea.
Álamo
De esencia considerada "pobre", se trata de una madera blanca, con tonalidades amarillentas o grisáceas, ligera y tierna, que se estropea fácilmente. Se utiliza para muebles rústicos o en la construcción de muebles. El uso más valioso que ha tenido en la historia del mueble es en Alemania, en el siglo XIX, para chapas e incrustaciones en el periodo Biedermeier.