Madre e hijo, de James Pradier, ejemplar póstumo - Francia, mediados del siglo XX

Óleo sobre lienzo. En la orilla de un lago dominado por picos montañosos, dos mujeres y un niño reman en una pequeña barca, cargando haces de leña y cestas; probablemente se dirigen a la otra orilla. La atmósfera rosada del atardecer resalta, creando coloridos reflejos en el agua y las cumbres nevadas. La obra se presenta en un marco de madera tallado y dorado de estilo contemporáneo.

La confesión involuntaria

Óleo sobre lienzo. Se trata de una copia de una pintura de Benjamin Vautier de 1881, vendida en una subasta de Sotheby's en 1998. El artista suizo se especializó en escenas de género populares: en esta pintura, dos jóvenes que caminan por el sendero que sale de la pequeña iglesia que tienen detrás intercambian secretos, ajenas al sacerdote sentado en un banco tras el árbol, leyendo su breviario. La obra se presenta en un marco de época.

Jarrón de claveles

Óleo sobre lienzo. Firmado abajo a la derecha. El artista pisano fue conocido principalmente como grabador (impartió clases de grabado en la Academia de Bellas Artes de Florencia), pero también se dedicó a la pintura, género que cultivó con notable originalidad y extraordinaria profundidad poética, empleando colores que él mismo definió como «los colores del alma». Si bien prefería los temas populares, las flores también fueron un motivo frecuente en su obra, hasta el punto de que una sección de la reciente retrospectiva (2023) dedicada a él en Pisa se tituló «Los colores y las flores del alma». La obra se presenta en un marco contemporáneo.

La propuesta

Óleo sobre lienzo. La escena representa una pedida de mano entre dos plebeyos y es una copia de la obra de Eugène Von Blass (1843-1931) de 1887. El artista italo-austríaco representó con frecuencia este tema, así como otras escenas costumbristas de la vida cotidiana. La obra se presenta en un marco dorado de época.

Vista del Matterhorn

Tres óleos sobre cartón. Los tres paneles están firmados en la esquina inferior derecha. En conjunto, las tres pinturas conforman una composición continua: el panel central representa la cima del Cervino, mientras que los dos paneles inferiores extienden la sierra a ambos lados hasta el pico más famoso. Alessandro Catalani pintó vistas y paisajes al óleo y acuarela, caracterizados por colores suaves y pinceladas sueltas. La obra se presenta en un marco de época (que necesita restauración).

Óleo sobre lienzo. La firma de G. Freye aparece en la parte inferior izquierda, lo que podría atribuir la obra a Georg Hermann Freye (1844-1921), artista de Dresde conocido principalmente por sus obras religiosas e históricas. La escena de género se inspira en temas y estilos de la pintura holandesa de los siglos XVII y XVIII. Ambientada en una casa particular, representa una comida familiar, con el padre, severo, hablando con su hijo, más desenfadado, bajo la mirada sonriente y cómplice de su madre. La obra se presenta en un marco de época.

Barcos de pesca

Litografías en color. Firmadas a lápiz. El pintor y grabador francés Guinegault creó numerosas vistas y paisajes, tanto de París como de las costas del norte de Francia, a menudo con pescadores como protagonistas. Las dos litografías se presentan en marcos de bambú de la década de 1960.

Óleo sobre lienzo. Artista desconocido (firma inconsistente G. Induno en la parte inferior). Escena costumbrista en el interior de una casa humilde, donde un anciano sentado en su cama recibe el abrazo de su nieto de visita. La ternura del gesto de afecto y dedicación entre ambos contrasta con la pobreza de la vivienda. El cuadro se presenta en un marco de época.

Falso desgarro de fresco. Emulando un antiguo fresco, se representa aquí el rostro de San Antonio Abad, reconocible por varios de sus rasgos iconográficos: viste hábito de fraile con escapulario, sostiene un báculo con la campanilla que usaban los frailes y ermitaños para anunciar su llegada a dar limosna, y con la mano derecha en señal de bendición, de la que emerge una lengua de fuego, símbolo de enfermedad, castigo y del dominio del bien sobre el inframundo. La obra está enmarcada por un listel.

Paisaje

Óleo sobre tabla. Firmado abajo a la derecha. Luigi Comolli, artista milanés, destacó por sus paisajes y bodegones. Su obra muestra una clara influencia impresionista, fruto de su formación en París. Presentado en un marco de mediados del siglo XX.

Óleo sobre lienzo. Principios del siglo XX. Esta pintura de gran calidad fue creada por un artista anónimo inspirado en la obra de Vittorio Reggianini (1858-1938), quien gozó de un enorme éxito con sus escenas de interiores y salas de estar, representando a mujeres o niños en actividades cotidianas, a menudo recreativas, como estas dos señoras que disfrutan del té y conversan amigablemente. La pintura se presenta en un marco contemporáneo.

Técnica mixta sobre papel. Iniciales AS en la parte inferior derecha. Un ramo de rosas destaca sobre un fondo azul. La pintura se presenta en un marco contemporáneo ebonizado, decorado con tallas doradas.